(NO) SOMOS FOTÓGRAFOS DE BODA

Prometemos desaparecer el día de tu boda

(NO) SOMOS FOTÓGRAFOS DE BODA

enfocamos a ciegas cuando la canción lo exige

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No venimos a maquillar lo que ocurre ni a ordenar lo inesperado. Nos atrae el descontrol, lo que se escapa, lo que no se puede repetir. Observamos el caos, lo dejamos ser y disparamos justo antes de que desaparezca. Porque lo salvaje también es bello, y no necesita permiso.
Esto no es una boda perfecta. Es una historia real. Como tú.

fotos DE BODA naturales, espontáneas, creativas

nos desplazamos a cualquier parte de españa

Capítulo 0 · Cuando aún no llevas el vestido

Hay churros en la mesa, media botella de champán abierta antes de tiempo y un altavoz que repite la misma canción porque nadie recuerda cambiarla.
Nos deslizamos detrás del vapor del secador, entre risas nerviosas, y empezamos a coleccionar momentos: la mirada que le lanzas a tu mejor amiga en el espejo, el “¿dónde están mis zapatos?” convertido en himno de guerra.

Capítulo I · El ritual sin coreografía

Cuando la puerta del ayuntamiento o la iglesia se abre, nadie ve cómo te tiembla el pulso.
Nosotros sí.

Una micro-duda, un “respira” susurrado, un pestañeo que dura menos de un segundo… y click.
No gritamos “mirad aquí”. Dejamos que las miradas choquen solas y se queden pegadas en la foto.
Porque la foto que de verdad importa sucede cuando nadie la espera: ese beso que te roba tu pareja cuando no hay un coro de móviles alrededor.

Capítulo II · Carretes con alma propia

A mitad de la celebración sacamos del bolsillo dos carretes que caducaron cuando aún sonaba Nirvana en la radio. Los cargamos sin prisa, como quien enciende una vela en plena tormenta. En cada avance del carrete escuchamos el azar dictar sentencia: quizá un fogonazo rosa atraviese tu brindis; tal vez un verde marciano abrace el beso que te roba tu pareja tras el confeti. Esa imperfección es pura verdad.

Capítulo III · El baile y el ruido

La pista parece un planeta nuevo. Luces estroboscópicas, tacones abandonados, corbatas convertidas en cintas ninja. Saltamos con vosotros, sudamos con vosotros, enfocamos a ciegas cuando la canción lo exige. No hacemos fotos perfectas; hacemos fotos que laten.